Camping en Tossa de Mar

Unas vacaciones en Tossa de Mar te permitirán desconectar del día a día y te ofrecerán preciosos momentos de relax total. Playa Gran, playa de El Codolar o playa de la Mar Menuda, por citar las más conocidas, ofrecen largas extensiones de arena fina, ideales para tumbarte a tomar el sol. Sumérgete en las aguas cristalinas de la costa para refrescarte o practicar deportes acuáticos como el buceo o el esnórquel. ¡Las riquezas de los fondos marinos te están esperando! Las familias apreciarán las playas, cercanas al centro de la ciudad, perfectamente acondicionadas para acogerles, mientras que las parejas o los grupos de amigos preferirán las playas más alejadas y salvajes para disfrutar de más tranquilidad.

Construidas entre los siglos XII y XIII, las murallas representan el emblema de la ciudad. Constan de cuatro bastiones y tres torres de vigilancia, y tienen también un faro, antiguamente utilizado como torre de vigilancia, que es el punto más alto de la muralla. Tras la muralla medieval se esconde una ciudad protegida, que ha sabido conservar el encanto y la autenticidad de antaño. 

Mientras paseas por la ciudad, detente a visitar el castillo con vistas al mar. Seguramente verás un pasadizo en la muralla que conduce al arroyo de La Caleta. Este camino, llamado "el agujero del demonio", era utilizado en la época por los pescadores para poder llegar a sus embarcaciones.

Descubrir un nuevo destino también significa descubrir su gastronomía. Los platos típicos de Tossa de Mar se basan en el pescado, ya que la pesca es una actividad especialmente importante en este destino. Para degustar los platos típicos de Tossa de Mar, toma asiento en uno de los numerosos restaurantes que salpican la localidad. 

No dejes de probar la famosa "simitomba", un plato a base de pescado fresco con patatas, perejil, ajo, tomate, azafrán y alioli. En septiembre, este plato tradicional y típico es objeto de un concurso entre los distintos restaurantes de la estación, que ofrecen su propia receta a lugareños y viajeros.

Cada jueves se colocan más de cien puestos en Rambla Pau Casals y calles próximas. Es de visita obligada.

A lo largo del año se organizan diversas fiestas para mantener las tradiciones y honrar el patrimonio de la ciudad. En enero, durante la Fiesta Major d'Hivern, Tossa de Mar cobra vida e invita a los viajeros a mezclarse con los lugareños durante ferias, desfiles tradicionales, exposiciones y durante el "Voto del Peregrino", una ruta de 40 kilómetros que conecta Tossa de Mar con la ermita de Santa Coloma de Farners. 

En temporada estival, la Festa Major d'Estiu ofrece un auténtico espectáculo de bailes populares, conciertos y fuegos artificiales. Es también en esa época cuando se celebra el festival de música Rumba en la Playa Gran.